Enclavada entre el desierto y el océano Pacífico, Antofagasta no solo cautiva con su paisaje impresionante, sino también con una escena gastronómica vibrante que celebra la diversidad de sabores.
Desde exquisiteces marinas hasta las tradiciones de la parrilla argentina y la esencia de la cocina chilena, la ciudad ofrece una experiencia culinaria única. En estos lugares no solo sirven platos excepcionales, sino también ofrecen experiencias culinarias que capturan la esencia de Antofagasta.
Desde la traducción hasta la innovación, cada lugar es una invitación a explorar los ricos matices de la gastronomía en esta encantadora ciudad costera.
Los mejores restaurantes en Antofagasta
Amares Costafusión
Inaugurado en 2015 por el chef Rodrigo Soto, Amares Costafusion es un faro de la fusión gastronómica. Este restaurante nació de la pasión del chef por explorar y combinar sabores de diversas culturas, fusionando la frescura de los ingredientes locales con técnicas culinarias mediterráneas. La ambientación relajada y la atención personalizada crean una experiencia que va más allá de la comida, transportando a los comensales a un viaje sensorial.
El chef Soto, apasionado por la sostenibilidad, colabora estrechamente con pescadores locales, garantizando ingredientes frescos y de calidad. La carta, que cambia según la temporada, refleja un compromiso con la autenticidad y la innovación y su plato estrella es el risotto de mariscos con salsa de rocoto, una auténtica sinfonía de sabores.
El precio medio del restaurante es de $25.000 CLP por persona y sus clientes lo valoran como una explosión de sabores que te transporta.
Mu Grill House
Desde 2008, Mu Grill House ha sido un referente de la parrilla en Antofagasta. Fundado por la familia González, el restaurante es más que un lugar para disfrutar de la carne asada; es un templo de la tradición argentina en Chile. La parrilla, la sazón única y la atención cálida han convertido a Mu Grill House en un punto de encuentro para los amantes de la carne a la brasa.
La parrilla en este restaurante es más que una técnica, es una tradición familiar que se ha transmitido de generación en generación. Su plato estrella es el Asado Mu Especial, una parrillada única que combina cortes selectos de carne, marinados con especias secretas de la casa y asados a la perfección. Los cortes premium se seleccionan con cuidado, y la experiencia culinaria se complementa con una cuidadosa selección de vinos chilenos que realzan los sabores ahumados.
El precio medio de este restaurante es de $22.000 CLP por persona y los clientes destacan la calidad de la carne, que se derrite en la boca.
Tio Jacinto
Desde 1990, Tio Jacinto ha sido un bastión de la cocina chilena en Antofagasta. Con una tradición que se remonta a generaciones, este restaurante, dirigido por la familia Muñoz, ha preservado la esencia de los sabores locales. El local acogedor y familiar es un tributo a las raíces de la cocina chilena. Tio Jacinto es un viaje al pasado, donde las recetas de la abuela se mantienen intactas.
Cada plato cuenta una historia, y la calidez del personal, muchas veces miembros de la familia Muñoz, hace que cada visita sea como volver a casa. El plato estrella del restaurante es el pastel de jaiba, elaborado con jaiba fresca y una mezcla de ingredientes locales, una delicia que captura la esencia de la costa chilena en cada bocado.
El precio medio es de $18.000 CLP por persona y los clientes coinciden en que Tio Jacinto es como un abrazo a la comida chilena.
Restaurante Aurora
Desde 1985, Restaurante Aurora ha sido un punto de encuentro para aquellos que buscan autenticidad culinaria. Con una historia arraigada en la tradición familiar, este lugar es un tributo a los sabores clásicos chilenos. La atmósfera hogareña y la atención personalizada hacen que cada visita sea una experiencia acogedora.
Aurora es un remanso de autenticidad donde la tradición chilena se vive en cada rincón. Los ingredientes frescos provienen de productores locales, y la cocina, que ha evolucionado con los años, sigue siendo un homenaje a los sabores que han definido la gastronomía chilena. Cada plato es una conexión con la historia de Chile y una celebración de la cocina casera de alta calidad siendo el caldillo de congrio su plato estrella.
El precio medio es de $20.000 CLP por persona y sus clientes consideran el restaurante como un tesoro gastronómico.
Imagen de TripAdvisor